sábado, abril 01, 2006

Cae la noche

Cae la noche,
y en el silencio solitario,
tu cuerpo encuentro.

Mis manos lentas,
rasgan el aire y,
con trazos imaginarios,
delimitan tus formas.

Vuelan y se enredan en tus cabellos;
sensación sutil de ligereza;
se posan en tus labios y los dibujan;
y con la tinta de tu saliva,
mis dedos dan forma a tu cabeza.

Ya se abren las manos,
y con la palma, palmo a palmo,
palpo el cuello, que se agita.

Se mece a mi merced,
balanceándose en cadenciosa melodía.

2 Comments:

Blogger aldara san lorenzo said...

¡Lo que daría por oírtelo decir!
Tiene música, tu texto.
Se balancea... y se toca.

10:51 a. m.  
Blogger Simplemente Olimpia. said...

Una oda que embruja al tacto...que hace dudar al tiempo, que humilla al final....por qué siempre me quedo pidiendo más?...muestrame tus instintos infinnitos...no me ofrezca sólo lo nímio, no me des tinieblas....prosigue.
Olimpia.

12:26 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home